Una línea recta establecida como eje, se abre paso entre los árboles, se expande, y se dibujan espacios que buscan la luz.
Una vez accedemos a la parcela, se bifurca el camino en dos brazos que dan acceso a nivel de planta baja por un lado y de planta sótano por otro.
A nivel de planta baja, un porche con vistas a la montaña permite el aparcamiento para cuatro coches. El origen de la línea de luz, es un estanque con palmeras que nos da la bienvenida.
Desde el exterior, nos adentramos poco a poco en el interior de la casa, pasando por espacios a doble altura llenos de luz, donde el patio interior es el gran protagonista. Introduce paisajismo en el interior de la vivienda con su estanque y sus plantas que dan pinceladas de color.
A cada lado de la entrada, se encuentra la escalera por un lado, y el ascensor por el otro. Tras el ascensor, se ubica el aseo de cortesía de esta planta.
El salón es el corazón de la casa. Un espacio completamente acristalado, hacia el oeste (con vistas a la piscina) y hacia el este (a través del patio interior), donde los límites entre interior y exterior llegan a difuminarse. Junto a la chimenea, se ubica el acceso a la sala de TV, un espacio más acogedor e íntimo para usar como sala de estar cuando no hay invitados.
Todos los ambientes se comunican de un modo fluido. Cocina, comedor y estar quedan conectados por amplios huecos. La cocina, con una gran isla que integra barra para desayunos, se abre a través de un amplio ventanal a la montaña.
Al sur, se sitúan dos dormitorios de invitados.
“La línea, eje del proyecto, se prolonga con la piscina desbordante, la cual podremos observar nada más acceder a la vivienda a través del gran patio acristalado. Junto a la misma, se ubica un porche exterior. Porches y terrazas en los diferentes niveles se abren a una naturaleza sosegada de la que poder disfrutar.
Al acceder a planta alta, continúa el espectáculo de luz. Toda la galería de acceso a los dormitorios queda iluminada por el gran patio central. En este nivel, se sitúan tres dormitorios y el dormitorio principal, el cual cuenta con dos vestidores independientes. El baño principal es el gran protagonista. Simétricamente se sitúan dos lavabos y los inodoros, y en el centro, una gran bañera exenta. Tras la misma, se sitúa una ducha doble con vistas a la montaña. El baño se abre a una terraza donde se sitúa un jacuzzi rodeado de naturaleza.
En planta sótano el ocio está servido. Al acceder a este nivel, la luz inunda el espacio central a través del estanque del patio. La piscina queda rodeada de una pared de vidrio que dota de luz a las circulaciones alrededor de la misma. La bodega es un atractivo más de este nivel, con su pared acristalada y sus estanterías iluminadas que muestran los vinos como un gran tesoro.
A un lado de la piscina se sitúa el gimnasio y la sala de cine. Y al otro lado el garaje para cuatro coches y cuartos técnicos.
La vivienda cuenta con un estudio para el servicio con acceso independiente desde el exterior. Junto al hall del servicio se sitúa el lavadero, trastero y vestuario y baño para el servicio.
Al pasear por los distintos espacios generados a partir de “la línea”, nos sentimos arropados por la luz que se filtra por cada rincón, al calor de sus espacios llenos de vida y de la naturaleza que se introduce en la vivienda.